Los últimos resultados de victoria en el referéndum - consulta popular del 7 de mayo son el fin de un objetivo inmediato que permitió palpar la correlación de fuerzas tanto de las diferentes organizaciones sociales así como de la sociedad civil, entrando - esta última - en una participación más profunda sobre el quehacer político de la realidad nacional. La importancia de esta movilización social permite abrir la visión sobre la necesidad de organizar a la población en su conjunto, la amplitud democrática se hace evidente con el surgimiento del debate, agitación y organización de distintos sectores sociales que a pesar de su simpatía o no con este proceso retoman nuevamente su papel como actores sociales.
Sin embargo, al igual que una actuación teatral, la función acaba cuando baja el telón en medio de los aplausos de los asistentes y, con la satisfacción general se realiza la despedida hasta la próxima función.
La inmediatez de la participación social en esta consulta se consumió únicamente en el mismo espacio temporal que finaliza con los resultados electorales, parecería así mismo que los procesos políticos y su actuación estarían entrando a una lógica funcional de regulación histórica como un autómata construido – como dice Walter Benjamin- de tal manera que resultaba capaz de replicar a cada jugada de un ajedrecista con otra jugada contraria que le aseguraba ganar la partida. Un sistema de espejos despertaba la ilusión de que esta mesa era transparente por todos sus lados. En realidad se sentaba dentro un enano jorobado que era un maestro en el juego del ajedrez y que guiaba mediante hilos la mano del muñeco.
Es necesario entrar en esta disputa frente a un falso espacio imaginario que actúa como arbitro dentro del escenario de la actividad política. La normativa no puede ser legitimada por la organización revolucionaria y pero aún caer en su desenvolvimiento, porque el horizonte que nosotros vemos retoma la historia para continuar organizando la revolución en este presente permanente, razón por la cual este objetivo inmediato de la victoria del sí, es ya el pasado que retoma vigencia en el presente de lucha.
Sin embargo, porqué realizamos está crítica a pesar de que ganó el sí en las últimas elecciones y en la cual nuestra organización participó protagónicamente. Existirían dos respuestas concretas que podrían explicar está inquietud.
Marx al referirse a la sociedad civil se expresa como el hogar, el escenario de toda la historia. Esta es la realidad y el único contexto al cual podemos referir y transformar, una historia en constante dialéctica que encuentra en si misma la permanencia de cambio y a la cual no la podemos negar y peor aún dejarla que continúe en la lógica hegemónica de falsa racionalidad. Es así, que a la permanencia de cambio es imprescindible la permanencia de rupturas revolucionarias que generen contradicciones más agudas dentro del orden capitalista. Nuestro retorno debe ser hacia nuestros propios planteamientos y a los constructores de la propia historia, debemos subrayar que este proceso, incluyendo la última consulta, no es nuestro proyecto político, son reformas progresistas cuyos resultados han sido consecuencias de luchas históricas de aquellos mismos sujetos revolucionarios. Es por esta misma razón que la pseudo-izquierda impide el avance de procesos por la mezquindad política. Intentan ser la oposición por su incapacidad de llevar adelante los cambios que ellos mismos antes proponían.
Es en la alianza estratégica con la sociedad civil, que fortalece el sustento para llevar adelante cualquier cambio de avanzada, por lo que es de vital importancia continuar con nuestra “campaña orgánica” que no se presenta solo en elecciones sino que permanece en el orden del día de la agenda diaria de tod@s l@s comunistas.
Por otro lado, este tipo de victorias crea también la antítesis directa representada en el aumento del revanchismo de los sectores más reaccionarios plenamente de derecha así como de una falsa izquierda que caerá en el juego de ser la “llanta de emergencia” que utilizará la oposición para generar convulsión social. Estas elecciones y la victoria del sí son de mucha importancia en nuestro país, en medio del torbellino político muchas organizaciones y personajes se desenmascararon mostrando su verdadero rostro (reaccionario y oportunista) incluso dentro de organizaciones de izquierda como el Partido Socialista cuyo fraccionamiento es una muestra palpable del grado de conflicto y falta de fortaleza política para asumir revolucionariamente el actuar en este y otro proceso, cualquiera que sea.
Sin embargo este cambio de posiciones en medio de la barricada de enfrentamientos, permite visualizar también quienes pueden ser los posibles aliados; y coincidencialmente podemos responder que somos nosotr@s con el pueblo revolucionario.
Al mismo tiempo debemos tener presente el agradecimiento que brindó Rafael Correa al Partido Comunista del Ecuador, que será utilizado por nuestros detractores para desprestigiar a nuestra organización y pretender estancar nuestro avance revolucionario, porque así como el Presidente se dio cuenta de la importancia de nuestro Partido, la oposición verá como amenaza nuestra presencia.
A la Juventud Comunista del Ecuador en ningún momento se le terminó la campaña, l@s comunistas continuamos en esta campaña revolucionaria por el sí a la radicalización y al socialismo!!!
Juan Francisco Torres
Secretario General Juventud Comunista del Ecuador
Quito, 8 mayo 2011
