En los diez años del Caguán
A diez años de la suspensión unilateral del proceso de diálogo entre el gobierno nacional y la guerrilla de las FARC, el Partido Comunista Colombiano reafirma el importante significado de dicho proceso, el alcance de la adhesión nacional e internacional a la búsqueda de una vía civilizada para la paz en el país así como el empeño afirmativo de los funcionarios, de los voceros de la insurgencia y de representantes de la sociedad que contribuyeron a avanzar hacia un entendimiento.
La versión en negativo que se ofrece ahora desde el ejercicio mediático oficial no puede invisibilizar la realidad del camino cumplido. Hoy es mucho más claro el peso de los factores contrarios a la paz que llevaron a la ruptura: la aprobación e imposición por el congreso y la administración estadounidense del Plan Colombia y el reagrupamiento de la ultraderecha colombiana con el narcoparamilitarismo, en la pretensión de “refundar” la nación. El pueblo colombiano sufre aún los impactos de la seguridad democrática, del desconocimiento de las libertades y la violación de los derechos humanos.
La contundencia de estos hechos no excusa los errores, abusos y decisiones equivocadas de la contraparte insurgente que facilitaron el viraje del régimen y los planes para relanzar la confrontación, con todas sus consecuencias ulteriores.
Es la oportunidad para reexaminar y revalorar, no para negar y lanzar a la basura los logros. La agenda de temas, establecida en común, con estudios y consultas serios y suscrita por las partes, es un documento público, en varios aspectos actual y válido. El PCC reafirma su convicción de que la paz es posible por la vía del acuerdo y no por la de la guerra con sus dolorosos efectos.
Saluda los actos conmemorativos en el municipio de San Vicente del Caguán y expresa su solidaridad con todas las organizaciones y personas que luchan por una paz democrática, con justicia social y plena soberanía.
Partido Comunista Colombiano
Integrante del PDA
Jaime Caycedo Turriago
Secretario General